martes, 25 de septiembre de 2012

Historia del humanismo (II). Roma y la civitas.


Continuando con la serie que pretende hacer un recorrido histórico por aquellas etapas que han supuesto una nueva fase en el desarrollo del humanismo como concepto y realidad debemos de detenernos ahora en el período de desarrollo de la cultura latina. Ya que es en esta época cuando se habla de humanismo en sí. Al igual que en Grecia –ver entrada anterior- se entiende que incluye elementos teóricos y prácticos y que busca como objetivo la civilización. Pero, a diferencia de la paideia griega, este nuevo saber pretendía llegar a toda la humanidad. Por lo que podemos ver Roma sigue la senda iniciada y andada por Grecia pero va más allá de donde esta lo hizo. Así, este modelo que analizamos es heredero directo de las enseñanzas helenas en torno a la idea de humus cultural. Es decir, del significativo papel que tiene la cultura en nuestro proceso de humanización. Tal es así que entenderán que es un elemento más de nuestra naturaleza y la educación uno de sus mayores logros. Dentro de los aspectos prácticos de esta se centrarán en el papel que juega en nuestras vidas la política y la ética. Un ejemplo claro lo podemos encontrar plasmado de forma muy clara en la obra de Plutarco de Queronea

Vemos que entre el pensamiento heleno y el romano se produce una especie de simbiosis en la que podemos hablar de pensamiento grecorromano como unión de las dos culturas más importantes y poderosas de ese momento histórico –con permiso de Egipto-. Esta simbiosis no sólo va a marcar el modelo humanista seguido en la época, sino que va a influir en todo el pensamiento occidental posterior. De ahí que nuestro modelo encierre en lo más profundo de su ser las enseñanzas de estos primeros pensadores.

“Los principios intelectuales de esta tradición son griegos y, antes de ser explicitados por la filosofía, habían sido aplicados por la más antigua poesía helénica. Los grandes escritores romanos los incorporan en el espíritu y en el estilo de sus obras. En ellas, como en toda gran literatura, se logra una universalización de la experiencia humana, que es la que les otorga la capacidad de convertirse en modelo y fuente de inspiración para la cultura moderna. Sin el singular e irrepetible proceso de asimilación de la cultura griega que realizan los escritores romanos de la época clásica, no se habría establecido la continuidad de una tradición que es el eje de la historia espiritual de occidente”[1]




jueves, 6 de septiembre de 2012

Historia del humanismo (I). Grecia y la paideia


Advertencia y anuncio
Durante estos dos meses de ausencia estival, he notado que las entradas que más visitas han tenido y, por tanto, mayor interés han despertado son las relacionadas con la cuestión del humanismo. He tratado este asunto centrándome en autores del S.XX  con nombre propio, como son: Sartre, Heidegger y Foucault. Y en escuelas o movimientos de pensamiento como La escuela de Frankfurt y la Posmodernidad. Pero, en lugar de seguir tratando a autores actuales como Lyotard, Vattimo, Sloterdijk, Bobbio y Magris más profundamente y lo que hayan dicho sobre tales asuntos. Creo que debo emprender un recorrido histórico que nos haga ver con detenimiento cómo surge este problema y su importancia en el desarrollo universal de la filosofía y su influencia en la forma de entender la vida, el mundo y nuestra relación con este. Ya advierto que será un recorrido general y amplio por cada etapa y que la finalidad que perseguimos no es la de conocer en profundidad a cada autor y su pensamiento sino entender el espíritu y la esencia de cada momento de modo que si cometo algún error o caigo en hacer generalidades pido disculpas y estoy abierto a cualquier comentario u opinión que queráis expresar. Así, sin más preámbulos creo que es necesario dar comienzo a esta pequeña serie de entradas y empezar por donde (casi) todo comenzó, en Grecia.


La paideia griega. 
Podemos situar la aparición de la problemática en torno al humanismo y a la existencia de una humanitas, como elemento definitorio del género humano, en la Grecia del S.V a. C. Cuando Sócrates decide orientar su saber a plantear cuestiones acerca del hombre y abordar cuestiones como el análisis de la razón y entender la importancia de esta como elemento que orienta al hombre en la búsqueda de la Verdad y como herramienta para fundamentar la ética. El ateniense, al centrar su pensamiento en torno al hombre crea la filosofía antropológica dando nueva orientación al saber filosófico alejándolo de los intereses previos planteados por los pensadores físicos, como Tales de Mileto, Anaxágoras o Leucipo que intentaban dar respuesta a la problemática del arché y de la stoicheia. Es decir, El primer principio del que surge el universo y la composición última de la realidad.

                                                                  Sócrates (470-399 a.C.)